viernes, 29 de mayo de 2015

Fármaco chino que ralentiza el alzhéimer entrará en fase de pruebas con humanos


Mujer que sufre de alzhéimer. Vince Alongi/Creative Commons  

Un fármaco diseñado por investigadores chinos que ha conseguido resultados positivos a la hora de ralentizar el avance del alzhéimer en animales entrará próximamente en fase de pruebas clínicas, anunciaron este domingo los responsables de este proyecto.

El medicamento, desarrollado por científicos del Instituto de Salud y Biomedicina de Cantón de la Academia China de Ciencias, ha demostrado su efectividad hasta ahora en la mejora de la memoria y las habilidades cognitivas de animales, explicó el director del equipo que lo investiga, Hu Wenhui.

Así lo muestran los experimentos practicados hasta ahora en cerdos de Guinea, por lo que en la siguiente fase de desarrollo de este compuesto, llamado AD16, se probará con humanos.

El AD16 ralentiza el avance del alzhéimer, al funcionar como un agente antineuroinflamatorio que puede aliviar el daño causado por las proteínas beta-amiloides en las neuronas.

Los fragmentos de esta proteína se acumulan en el cerebro de los enfermos que padecen el mal de Alzheimer formando unos depósitos que impiden que las células del cerebro puedan conectarse entre ellas y transmitir los impulsos nerviosos, lo que acaba afectando a sus habilidades cognitivas y su memoria.

Millones de personas en todo el mundo padecen esta enfermedad neurodegenerativa para la que no se ha descubierto, de momento, un tratamiento.





miércoles, 27 de mayo de 2015

ESTUDIOS REVELAN QUE LOS JUEGOS DE ACCIÓN INCREMENTAN EL RIESGO DE ALZHÉIMER


The Division   

¿A quien no le gusta jugar en la Pc? Esos juegos de acción que tanto nos cautivan, esos juegos de aventura que nos emocionan bastante, entre otros.
Ver como día a día la tecnología “nos cuida” y nos sorprenden con sus nuevos hallazgos y descubrimientos.
Los Juegos de Acción, uno de los géneros más populares del momento, podrían aumentar el riesgo de sufrir alzhéimer, según indica un estudio realizado en la Universidad de Montreal.
Títutlos como Call Of Duty y Assassin’s Creed necesitan que los Gamers naveguen en la pantalla utilizando un área del cerebro llamada “núcleo caudado”, lo que lleva a perder materia gris en el hipocampo.
Precisamente estudios anteriores han determinado la gran importancia del hipocampo, que controla la memoria, aprendizaje y emociones. Desordenes neurológicos y psicológicos están asociados a la perdida de materia gris.
“Personas que juegan bastante títulos de acción podrían reducir la integridad de su hipocampo y sufrir desórdenes neurológicos“, indicó el doctor Gregory West de la Universidad de Montreal.   
Los resultados del estudio publicado en Proceedings of the Royal Society B se obtuvieron luego de monitorear a 59 personas, 29 de ellas habituales jugadores de títulos de acción, con cascos que grababan las ondas cerebrales y el movimiento de los ojos cuando exploraban el mapa de un videojuego.


lunes, 25 de mayo de 2015

cosas que no sabías sobre el Alzheimer


Could smell test detect Alzheimer's?     

Aproximadamente 44 millones de personas viven con demencia en todo el mundo, de acuerdo con la Asociación de Alzheimer. Para 2050, se espera que ese número más del triple a 115 millones de dólares.
En la lucha contra estas cifras de crecimiento rápido, expertos de todo el mundo discutirán las últimas investigaciones en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer en Copenhague, Dinamarca, esta semana.
Aquí hay cinco cosas que hemos aprendido acerca de la enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia:
Hipertensión i n vejez puede salvar su cerebro
La presión arterial alta generalmente se llama el "asesino silencioso". Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad de California sugiere ahora que si tienes más de 90, la hipertensión puede salvar la vida de las células del cerebro.
La hipertensión puede proteger contra la demencia en personas mayores de 90 años, dicen los autores del estudio.
Los investigadores siguieron a 625 participantes que desarrollaron hipertensión arterial en los 90 años para un máximo de 10 años y encontraron que el riesgo de demencia fue 55% menor que las personas sin antecedentes de hipertensión.
Sin embargo, el estudio no promueve la hipertensión en las personas mayores, dado que la presión arterial alta está relacionada con otros resultados malos.
"No creo que dice si encuentro a alguien que está haciendo bien a los 90 años, cuya presión arterial es de 120/80, debemos darles de comer sal al chocar su presión arterial," dice William Klunk, vicepresidente de la Asociación de Alzheimer Consejo Asesor Médico y Científico.
El estudio simplemente muestra que cuando se trata de los niveles normales de la presión arterial, no podría ser de una talla única para todos a con respecto a la edad, dice.
Mejor tarde que nunca
Las personas mayores pueden reducir su riesgo de la edad avanzada deterioro cognitivo y enfermedad de Alzheimer con una serie de cambios de estilo de vida, sugiere una investigación reciente.
Un ensayo clínico de dos años desde el Instituto Karolinska y el Instituto Finlandés de Salud incluyó 1.260 participantes mayores de 60 a 77. Una parte del grupo recibió un "estilo de vida-paquete", incluyendo orientación nutricional, el ejercicio físico, la gestión de los factores de riesgo para la salud del corazón, entrenamiento cognitivo y las actividades sociales. El grupo control recibió consejos de salud estándar.
Después de dos años, el grupo de estilo de vida de intervención hizo mucho mejor en pruebas de memoria y el pensamiento.
Sabemos por estudios anteriores que la aplicación de los factores de estilo de vida en la mediana edad puede protegerse contra la enfermedad de Alzheimer más tarde, dice Ralph Nixon, presidente de la Asociación de Alzheimer de Medicina y el Consejo Científico Asesor."La buena noticia de este estudio en particular es que este tipo de cambios se puede implementar en sus 60 y 70 años."
Jugar juegos hace que su cerebro cresca
Las personas de mediana edad que se encontraban juego jugadores ávidos (piensan crucigramas, damas, cartas) tienden a tener cerebros más grandes que las personas que no participan en juegos, según un reciente estudio que analizó los escáneres cerebrales.
"Es como mirar a la masa muscular de alguien", dijo el Dr. Laurel Coleman del Centro de Evaluación Geriátrica Maine Medical Center. "Lo malo es cuando es más pequeño, bueno cuando es más grande."
Los investigadores observaron específicamente a ciertas partes del cerebro de los participantes. El volumen de juego entre los jugadores fue mayor en las zonas que tienden a ser dañado por la enfermedad de Alzheimer, lo que sugiere la posibilidad de retrasar - tal vez incluso evitar - la enfermedad. Las personas que mantienen sus cerebros bombeados puntuaron más alto en las pruebas de su capacidad de pensar.
Coleman sugiere la mezcla para arriba: Pruebe potencialmente estimular actividades como aprender un nuevo idioma o la conmutación de la lectura de no ficción de la ficción - cualquier cosa que plantea un desafío cognitivo.
El ejercicio beneficia la mente para o
Ejercicio parece retardar el descenso hacia la demencia también.
Dos conjuntos de datos del Estudio de Mayo Clinic of Aging sugieren que el ejercicio puede influir positivamente en cómo se desarrollan deterioro cognitivo leve (un precursor de la demencia) y la demencia.
En un grupo de pacientes con deterioro cognitivo leve, Ejercicio físico parecía proteger contra el desarrollo de la demencia. Los datos de un grupo diferente de pacientes sanos que ejercieron - ya sea ligera o vigorosamente - mostraron que eran menos propensos a ser diagnosticados con deterioro cognitivo.
"Nunca nos volveremos a decir que estas cosas totalmente prevenir la enfermedad de Alzheimer, que van a curar", dijo Coleman, un geriatra. "Pero que van a ayudar a su cerebro."
La prueba s mell puede detectar el Alzheimer
En el futuro, una prueba de su sentido del olfato puede ayudar a los médicos a predecir el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
En dos estudios separados, los científicos encontraron que las personas que no pudieron identificar ciertos olores eran más propensas a experimentar deterioro cognitivo. Los investigadores creen que las células cerebrales cruciales para el sentido del olfato de una persona son asesinados en las primeras etapas de la demencia.
Los investigadores dicen que esta información podría ayudar a los médicos crean una prueba de olfato para detectar el Alzheimer antes. La detección temprana significa la intervención temprana y el tratamiento para retardar la progresión de la enfermedad. Los médicos de hoy sólo se puede diagnosticar la enfermedad de Alzheimer, una vez que se ha causado un daño cerebral significativo.
"A la vista de la mundialmente creciente epidemia de la enfermedad de Alzheimer, hay una urgente necesidad de pruebas de diagnóstico simples y menos invasivas que identificará el riesgo de la enfermedad de Alzheimer mucho antes en el proceso de la enfermedad", Heather Snyder, director de operaciones médicas y científicas de la Asociación de Alzheimer, dijo en un comunicado.



viernes, 22 de mayo de 2015

Investigan con robots y perros un tratamiento para Alzheimer


  


El Centro de Referencia Estatal de Atención a Personas con Enfermedad de Alzheimer (CRE), que este Martes 19 de Mayo por la  mañana  visitara en Salamanca el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, investiga terapias que aglutinan robótica y el tratamiento con perros para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Este proyecto busca la reacción ante los animales de los pacientes y una de sus novedades es la unión de un robot -un muñeco que simula una foca- y un perro, como una herramienta viva que aumenta el beneficio de estas terapias.
Alfonso Alonso, que hoy ha participado en una reunión con el Grupo Estatal de Demencias celebrado en el Centro de Referencia del Alzheimer, ha anunciado que a finales de este año será aprobada la estrategia del Ministerio de Sanidad con este tipo de enfermedades.
"Por un lado, irá dirigida a las enfermedades neurodegenerativas y, por otro, hacia la atención sociosanitaria", ha precisado.
El objetivo es el de una "mejor y precoz detección" de la enfermedad para conseguir que se viva más años, "a sabiendas de que habrá más enfermos crónicos", ha añadido.
Alonso ha insistido en que el modelo sanitario de su departamento varía "en función de las necesidades de los enfermos", aunque ha recalcado que además de la atención y de la prevención debe ir hacia "una atención global" en la que tendrán un papel importante los familiares.
Ante los nuevos avances en la investigación que se realiza en el Centro Estatal de Referencia del Alzheimer, Alfonso Alonso ha indicado que desde su Ministerio "se busca crear un marco que favorezca la investigación en la enfermedad", además de ahondar en "una mejor formación de los médicos de atención primaria".
Esta tesis ha sido ratificada por el director general del Imserso, César Antón, quien ha afirmado que en los últimos cuatros años "el presupuesto es idéntico, no se ha tocado".
Alfonso Alonso ha reclamado, de esta manera, "una visión de un proceso más integrador" en el que se piense desde el enfermo hasta los familiares.
Por su parte, Maribel González Ingelmo, directora del CRE Alzheimer de Salamanca, ha incidido en la importancia de estos proyectos de investigación y en el papel que juegan los familiares, quienes "están permanentemente en el centro para comprobar las buenas prácticas que se realizan con los enfermos".
"Existe una evidencia de que la presencia temporal o permanente de un perro puede aumentar el contacto social, así cómo mejorar la adherencia de otros tipos de terapias en personas con demencia", ha afirmado en este punto.
Desde el CRE Alzheimer de Salamanca se asegura, además, que la roboterapia es "una terapia no farmacológica que consiste en el uso de robots que simulan animales, dotados de inteligencia artificial y múltiples sensores que les permite comportarse e interactuar con los usuarios como si de un animal real se tratara".


miércoles, 20 de mayo de 2015

Los niveles de hierro podrían estar vinculados a la progresión a la enfermedad de Alzheimer, según un estudio


  


Mayores niveles de ferritina, una proteína de almacenamiento de hierro, pueden estar asociados con la transición del deterioro cognitivo leve (DCL) para la enfermedad de Alzheimer, según un nuevo estudio publicado hoy (martes 19 mayo 2015) en Nature Communications.
Durante un período de siete años, los investigadores de la Universidad de Melbourne monitorearon el rendimiento cognitivo de 91 individuos cognitivamente normales, así como 144 con deterioro cognitivo leve y 67 con enfermedad de Alzheimer . El estudio, que analizó diversos resultados, se encontró que los niveles más altos de ferritina en líquido cefalorraquídeo en los pacientes con MCI se vincularon con una conversión antes de la enfermedad de Alzheimer . Los investigadores también encontraron que la ferritina fue fuertemente ligada a la presencia del gen ApoE4, el más fuerte conocido gen de riesgo de la enfermedad de Alzheimer.
Dr. James Pickett, jefe de investigación de la Sociedad de Alzheimer, dijo:
"Evidencia anterior sugiere que un desequilibrio en hierro en el cerebro puede estar relacionado con la enfermedad de Alzheimer . Este interesante estudio se suma a estos hallazgos. El estudio, utilizando siete años de datos, encuentra que los niveles altos de la proteína ferritina almacenamiento de hierro pueden estar asociados con las personas con deterioro cognitivo leve que va a desarrollar la enfermedad de Alzheimer antes .
El mayor error que podríamos hacer sería tomar estos resultados en el sentido de que una prueba para la conversión de deterioro cognitivo leve a la enfermedad de Alzheimer es la vuelta de la esquina. No es lo suficientemente claro en este estudio si los niveles de hierro podrían ser utilizados para predecir esta conversión con suficiente exactitud y no podemos sacar ninguna conclusión acerca de si podríamos ser capaces de utilizar el hierro como un objetivo para futuros tratamientos. Tenemos que ver mucho más la investigación en áreas como esta, que es la razón por la Sociedad de Alzheimer se ha comprometido 100 millones de libras para la investigación de la demencia en los próximos diez años. "

lunes, 18 de mayo de 2015

El aceite de oliva y los frutos secos previenen el deterioro del cerebro

Los componentes antioxidantes y antiinflamatorios de los frutos secos y el aceite de oliva los convierten en excelentes aliados contra el deterioro cognitivo (que puede conducir a la demencia o al alzhéimer), según se desprende de un reciente estudio español publicado en la revista JAMA Internal Medicine.

El estudio, derivado del ensayo PREDIMED (Prevención con Dieta Mediterránea), contó con la participación de 447 voluntarios sanos a nivel cognitivo -tanto hombres como mujeres- pero con alto riesgo cardiovascular y con una media de 67 años de edad. La investigación se prolongó durante cuatro años y los participantes siguieron tres tipos de dieta: una dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra, una dieta mediterránea con un extra de frutos secos o una dieta control baja en grasa. Al mismo tiempo, durante los cuatro años de seguimiento, se realizaron evaluaciones de la función cognitiva de los voluntarios, tanto al inicio como al final del estudio.

Los resultados revelaron que las personas que seguían la dieta con aceite de oliva virgen extra o frutos secos tenían una mejor función cognitiva que las personas que tuvieron que seguir la dieta de control o baja en grasa (sin importar el sexo o la edad). Concretamente, la dieta de frutos secos fue la más idónea para mejorar la memoria y la dieta de aceite de oliva mejoró la función ejecutiva de los participantes.

Estas conclusiones avalan estudios anteriores que sugerían que los hábitos alimenticios y la función cognitiva estaban estrechamente relacionadas con la aparición de enfermedades neurodegenerativas; así, alimentos ricos en antioxidantes proporcionarían protección contra ellas previniendo el estrés oxidativo.

“Estos efectos beneficiosos de la dieta mediterránea son probablemente debidos a la gran cantidad de agentes antiinflamatorios y antioxidantes que proporciona”, explica Emili Ros, coordinador del estudio.







 





viernes, 15 de mayo de 2015

alimentos azucarados estarían relacionados con el Alzheimer


tortas 2 

 Al parecer los altos niveles de azúcar en la sangre serían perjudiciales para nuestro cerebro e influiría en el desarrollo de esta horrible enfermedad.
Una investigación publicada por Journal of Clinical Investigation reveló que los alimentos azucarados como los deliciosos pasteles y el chocolate, podrían ser causantes de la enfermedad de Alzheimer.


El estudio fue realizado por un grupo de investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington, y en sus conclusiones se señala que los niveles altos de azucar en la sangre podrían generar “daño sobre las funciones cerebral y exacerbar enfermedades neurológicas como la enfermedad de Alzheimer“.
Estos niveles altos de azúcar se pueden encontrar en quienes ingieren grandes cantidades de alimentos dulces, pero también en los pacientes que sufren de diabetes.

Según el encargado del estudio, Shannon Macauley, “los resultados sugieren que la diabetes, u otras condiciones que hacen que sea difícil de controlar los niveles de azúcar en la sangre, pueden tener efectos nocivos sobre la función cerebral y exacerbar enfermedades neurológicas como la enfermedad de Alzheimer”, afirma.
Para el experto, “esta observación abre una nueva vía de exploración de cómo la enfermedad de Alzheimer se desarrolla en el cerebro, así como ofrece una nueva diana terapéutica para el tratamiento de este trastorno neurológico devastador”.



miércoles, 13 de mayo de 2015

Nuevo vínculo entre la diabetes y la enfermedad de Alzheimer


     

Unos investigadores han puesto de manifiesto una conexión entre la diabetes y el mal de Alzheimer, proporcionando pruebas adicionales de que esta enfermedad que roba a las personas sus recuerdos podría estar promovida por un exceso de azúcar en sangre.

Si bien muchos estudios anteriores han señalado la diabetes como un posible contribuyente al desarrollo del mal de Alzheimer, el nuevo estudio (en ratones) muestra que niveles elevados de glucosa en sangre pueden incrementar rápidamente los niveles de la beta-amiloide, un componente esencial de las placas nocivas que se forman en el cerebro de los pacientes con enfermedad de Alzheimer. Se cree que la acumulación de esas placas es un factor temprano de activación de la compleja serie de cambios que el mal de Alzheimer ocasiona en el cerebro.

Lo descubierto por el equipo de la investigadora Shannon Macauley, de la Escuela de Medicina de la Universidad Washington en San Luis de Misuri, Estados Unidos, sugiere que la diabetes, u otros trastornos que dificultan el control de los niveles de azúcar en sangre, pueden tener en la función cerebral efectos dañinos hasta ahora no tenidos en cuenta, y empeorar las afecciones neurológicas como el mal de Alzheimer. El vínculo entre las dos citadas dolencias descubierto por Macauley y sus colegas podría abrir un camino hacia el desarrollo de nuevos tratamientos médicos.



lunes, 11 de mayo de 2015

Este es el fármaco que cura el Alzheimer


 Este es el fármaco que cura el Alzheimer       

Un nuevo medicamento contra la epilepsia podría convertirse en un prometedor tratamiento para la enfermedad de Alzheimer. Los resultados, publicados «Alzheimer’s Research & Therapy», refuerzan la teoría de que la hiperexcitabilidad cerebral juega un papel importante en la enfermedad de Alzheimer, y que los medicamentos anticonvulsivos – medicamentos que previenen o reducen la severidad de las crisis – representan un tratamiento prometedor.
En estudios anteriores, otros grupos han probado los efectos dellevetiracetam, fármaco anticonvulsivo utilizado en modelos de roedores, así como en ensayos clínicos en pacientes con signos tempranos de la enfermedad de Alzheimer. Los hallazgos sugieren que puede retrasar algunos de los síntomas de la enfermedad, incluyendo la pérdida de memoria.
En esta nueva investigación, Nygaard Haakon, de la Universidad de Columbia Británica (Canadá), probó los efectos de brivaracetam, un medicamento anticonvulsivo todavía en desarrollo clínico para la epilepsia y estrechamente relacionado con levetiracetam. Puesto que es 10 veces más potente que levetiracetam puede ser utilizado a dosis más bajas. Nygaard y sus colegas encontraron que revierte por completo la pérdida de memoria en un modelo de roedor de la enfermedad de Alzheimer.

Pérdida de memoria

Aunque el medicamento parece ser efectivo, los investigadores no tienen claro cómo funciona para revertir la pérdida de memoria. Nygaard también cree que el estudio presenta datos muy preliminares para el tratamiento futuro de los pacientes con la enfermedad de Alzheimer.
«Ahora tenemos muchos grupos de investigación diferentes que emplean fármacos antiepilépticos dirigidos a un mismo objetivo, y todos apuntan a un efecto terapéutico en los dos modelos de enfermedad de Alzheimer, pero también en los pacientes con la enfermedad», explica Nygaard, investigador del Centro Mowafaghian Djavad. «Ambos medicamentos son susceptibles de ser probadas en ensayos clínicos más grandes con pacientes con enfermedad de Alzheimer en los próximos cinco a 10 años». Y, añade, todavía se necesitan estudios clínicos más grandes en humanos antes de que podamos determinar si la terapia anticonvulsiva será parte de nuestro futuro arsenal terapéutico contra el Alzheimer.
Fuente: DC|ABC.es





       

viernes, 8 de mayo de 2015

El tratamiento con ultrasonidos que revierte el Alzheimer en ratones


   

No hay cosa que más nos guste en este blog que dar buenas noticias; esto es, hablar de descubrimientos, progresos y avances que aporten esperanzas consistentes a la vida de las personas que sufren Alzheimer y también a sus familias. En este caso, y siempre moderando el optimismo, lo que traemos es un verdadero notición: en Australia han probado con éxito un tratamiento que revierte la enfermedad en ratones. La clave son las ondas de ultrasonido.
Es un estudio de la Universidad de Queensland, en Brisbane, Australia; publicado el pasado mes de marzo en Science Translational Medicine. Varios ratones fueron genéticamente alterados para desarrollar Alzheimer antes de someterse al tratamiento de ultrasonido durante un periodo de entre cinco y siete semanas. Las ondas estimularon sus células microgliales, parte del sistema inmunológico del cerebro y encargadas de absorber las placas de amiloides que se asocian a las enfermedades neurodegenerativas.
Los resultados han sido asombrosos: el 75% de los ratones dejó de evidenciar daños cerebrales y recuperó capacidades cognitivas como la memoria, como quedó claro en exámenes y tests como laberintos. El tratamiento de ultrasonido ayudó a los pacientes a liberarse de los depósitos adicionales de proteínas en sus cerebros,  que impedían un funcionamiento correcto del órgano. Y lo mejor de todo: sin efectos secundarios aparentes.
Como bien sabes, en la actualidad no conocemos demasiadas formas efectivas de luchar contra el Alzheimer. Los tratamientos con fármacos tienen una eficacia muy limitada y efectos secundarios, mientras que las terapias alternativas no han conseguido ir mucho más allá de frenar los síntomas de la demencia, sin acercarse a la cura real de la enfermedad. De ahí que esta investigación australiana haya despertado grandes expectativas en todo el mundo.
En el horizonte, más pruebas, posiblemente en otros animales como ovejas. Las diferencias de grosor entre las calaveras de animales y humanos provoca que para aplicar el tratamiento a personas sean necesarias ondas de ultrasonido más potentes. Por otro lado, aún habría que identificar cuál es la etapa idónea para aplicarlo. El camino a recorrer todavía es muy largo, pero desde luego, parece que se ha encontrado una dirección a seguir.



miércoles, 6 de mayo de 2015

El consumo prolongado de sedantes se asocia al alzheimer.


   



Las benzodiacepinas, medicamentos con efectos sedantes y ansiolíticos, no se deben tomar como tratamiento contra el insomnio durante más de doce semanas para que el consumo prolongado aumenta el riesgo de desarrollar Alzheimer, entre otros efectos secundarios, según advirtió ayer la Sociedad Española de Neurología (SEN). Los neurólogos alertan tras haber constatado un aumento del número de casos de insomnio y que muchas personas recurren a las benzodiazepinas para paliarlo.
Según la última Encuesta sobre Alcohol y Drogas en España, el porcentaje de personas que toman hiposedants (benzodiacepinas) ha pasado del 5,1 en 2005 a 12,2% en 2013, y España es el segundo país de la OCDE que consume más tranquilizantes. Los datos del Ministerio de Sanidad indican que en 2013 se recetaron 1,5 millones de cajas de benzodiacepinas que en 2010, y entre las más consumidas figuran el lormetazepam (o el nombre comercial Noctamid), el lorazepan (como Orphidal), la Hidroxicina (como ataraxia), el diazepam (como el Valium), el alprazolam (como el Trankimazin) y el bromazepam (Lexatin).
La vinculación entre benzodiacepinas y alzheimer lo han establecido investigadores de las universidades de Burdeos y Montreal después de estudiar el desenvolupamentde la enfermedad en una amplia muestra de personas mayores de Quebec al que se habían prescrito estos fármacos. En las conclusiones, publicadas en la revista British Medical Journal, reconocen que no se ha demostrado una relación causa-efecto, pero sí la sospecha de una vinculación directa "que se hace más patente en el caso de terapias más largas y con benzodiacepinas de acción prolongada ". indica que tomar estos fármacos durante más de tres meses eleva hasta un 51% el riesgo de alzheimer.
La neuróloga Montserrat Pujol, responsable de la unidad del sueño del hospital de Santa María de Lleida y miembro de la SEN, se muestra prudente a la hora de interpretar los datos de esta investigación "porque no deja de ser un estudio farmaepidemiològic y la causa-efecto está por demostrar ". sin embargo, insiste en que las benzodiazepinas no deben tomarse de manera crónica porque sí están relacionadas con pérdidas de memoria y, además, "aunque al principio te ayudan a dormir, pasadas unas semanas, no tiene sentido tomar para que no mejoran la calidad del sueño ".
Psiquiatras y farmacéuticos consultados coinciden en que las benzodiazepines- y en general todos los ansiolítics- no deberían tomar más allá de un mes o mes y medio para que provocan problemas de tolerancia -cada vez se necesitan dosis más altas para tener el mismo efecto- y una dependencia muy importante. "Si tomas más de tres meses cada vez es más difícil dejar de tomarlas, cada vez necesitas más cantidad para que te hagan efecto, ya la larga dificultan la capacidad de memoria y concentración", resume. Además, cuentan, las benzodiacepinas, por sus efectos sedantes y depresores del sistema nervioso central, producen confusión mental, y los efectos que tienen de relajación muscular fomentan caídas, reflujo gastroesofágico y apneas. fuente: Mayte Rius, Barcelona, ​​La Vanguardia






lunes, 4 de mayo de 2015

Nuevo tratamiento para el Alzhéimer que podría restaurar la memoria en casi su totalidad

Ratón      Una nueva técnica terapéutica no invasiva podría revolucionar el tratamiento del alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas al optimizar el tratamiento de la memoria.

Científicos de la Universidad de Queensland, en Brisbane (Australia), dan detalles de la nueva técnica 'repeated scanning ultrasound' (SUS), que elimina la placa que se forma en el cerebro de los enfermos de alzhéimer con el uso de ultrasonidos. Se trata de la placa betamiloide, la cual interfiere en la sinapsis entre las neuronas cerebrales, según informa la revista científica ' Science Alert'.
Para ello, los investigadores utilizaron una prueba de ultrasonido combinada con microburbujas inyectadas en la sangre de ratones con alzhéimer. Estas vibran en reacción a las ondas emitidas con el objetivo de abrir temporalmente la barrera protectora de sus cerebros y erosionar la placa betamiloide.
Con la aplicación de esta técnica durante dos semanas se consiguió eliminar en un 75% las placas betamiloides sin causar daños en el tejido cerebral y una notable mejoría en la memoria, orientación y reconocimiento de objetos de los ratones tratados con ultrasonido.
El próximo paso será utilizar esta técnica en animales desarrollados como las ovejas, y para el 2017 se procedería a aplicarlos para los humanos.

                        

viernes, 1 de mayo de 2015

TIPOS DE DEMENCIAS: EL ALZHEIMER

        tipos de demencias el alzheimerHoy vamos a intentar aclarar algunos de los tipos de demencias que se diagnostican hoy en día. Existe mucha confusión cuando hablamos de demencia, de Alzheimer, de deterioro cognitivo leve, etc. Intentaremos que, con los artículos que a continuación se van a ir ofreciendo, podamos ir aclarando conceptos.
La palabra demencia describe un conjunto de síntomas que pueden incluir la pérdida de memoria, dificultades del pensamiento, la resolución de problemas o el lenguaje. La demencia es causada cuando el cerebro está dañado por enfermedades o por una serie de lesiones. La demencia es progresiva , lo que significa que los síntomas van a empeorar gradualmente.
La demencia es un término genérico. En él se describen los síntomas que se producen cuando el cerebro se ve afectado por ciertas enfermedades o condiciones. Hay muchos tipos diferentes de demencia, aunque algunos son mucho más comunes que otros, que a menudo se denominan de acuerdo con la condición que ha causado la demencia.  La más común de las demencias es la enfermedad de Alzheimer.

Tipos de demencias: El Alzheimer

La enfermedad de Alzheimer (se llama así gracias al apellido del médico que la describió por primera vez: Alois Alzheimer) es una enfermedad física que afecta al cerebro.  Durante el curso de la enfermedad, unas proteínas llamadas TAU se acumulan en el cerebro para formar estructuras denominadas “placas“; esto conduce a la pérdida de las conexiones entre las células nerviosas y, finalmente, a la muerte de dichas células y a la pérdida de tejido cerebral.
Las personas con Alzheimer también sufren una escasez de “mensajeros químicos que ayudan a transmitir las señales a todo el cerebro. Cuando hay una escasez de ellos, las señales no se transmiten eficazmente. Los tratamientos actuales para la enfermedad de Alzheimer pueden ayudar a aumentar los niveles de “mensajeros químicos” en el cerebro, lo que puede ayudar a mejorar algunos de los síntomas.
El Alzheimer es una enfermedad progresiva. Esto significa que poco a poco, con el tiempo, más partes del cerebro se dañan, así como también se vuelven más graves.

Los síntomas

Los síntomas de la enfermedad de Alzheimer son generalmente leves al principio, pero empeoran con el tiempo y comienzan a interferir con la vida diaria.
Hay algunos síntomas comunes a todos los pacientes que sufren Alzheimer, pero es importante recordar que cada persona es única y el nivel o grado de afectación varía según quien lo padezca.
Para la mayoría de las personas con la enfermedad, los primeros síntomas son fallos de memoria; por ejemplo, pueden tener dificultad para recordar hechos recientes y aprender nueva información. Estos síntomas se originan porque al principio, el daño se produce en una parte del cerebro llamada hipocampo, que tiene un papel central en la memoria del día a día.
TIPOS DE DEMENCIAS: EL ALZHEIMER IIConforme la enfermedad progresa, la pérdida de memoria interfiere cada vez más con la vida diaria. La persona puede:
  • perder objetos cotidianos (llaves, gafas) por la casa
  • no encontrar la palabra adecuada en una conversación u olvidar el nombre de alguien
  • olvidarse de conversaciones o eventos recientes
  • perderse en un lugar familiar
  • olvidar las citas o aniversarios.
Aunque las dificultades de memoria suelen ser los primeros síntomas de la enfermedad de Alzheimer, una persona con esta enfermedad también tendrá  (o desarrollará) problemas con otros aspectos del pensamiento, del razonamiento, de la percepción o de la comunicación. Algunos ejemplos son:
    TIPOS DE DEMENCIAS: EL ALZHEIMER III
  • lenguaje : intenta seguir una conversación y no puede o puede repetirse todo el tiempo  (puede ver los artículos relacionados: La comunicación en la demencia )
  • habilidades visoespaciales: problemas para juzgar la distancia o ver objetos en tres dimensiones; subir y bajar escaleras o aparcar el coche se convierten en un acto difícil para ellos.
  • dificultad para concentrarse, planificarse u organizarse: tienen dificultad para tomar decisiones, resolver problemas o realizar una secuencia de tareas (por ejemplo, cocinar una comida)
  • orientación:pueden sentirse confusos y/o perder la noción de la hora, del día/noche o de la fecha.
Los cambios en el estado de ánimo también suelen ser habituales. Pueden llegar a sentirse ansiosos, irritables o deprimidos .Muchas personas se vuelven retraídas y pierden interés en las actividades y aficiones que practicaban con anterioridad.

Progreso de la enfermedad

A medida que progresa la enfermedad de Alzheimer, los problemas con la pérdida de memoria, la comunicación , el razonamiento y la orientación se vuelven más graves. La persona necesitará más apoyo en el día a día.
Algunas personas comienzan a creer cosas que son falsas (delirios) o, con menos frecuencia , ver u oír cosas que no son reales (alucinaciones); estos síntomas pueden presentarse en la segunda etapa (Ver artículo relacionado: Fases y etapas del Alzheimer: Segunda fase, estadio moderado)
Muchos enfermos también desarrollan comportamientos que parecen inusuales o fuera de lugar (ver el artículo “Alteraciones de conducta“); estos incluyen agitación, inquietud, hablar en voz alta, repetir la misma pregunta, trastornos del sueño o reacciones agresivas . Tales comportamientos pueden ser muy molestos para su cuidador.
En las últimas etapas del Alzheimer, los paciente pueden llegar a ser mucho menos conscientes de lo que está sucediendo a su alrededor. Pueden tener dificultades para comer (ver “La alimentación de los enfermos de Alzheimer“) o caminar sin ayuda, por lo que se vuelven cada vez más frágiles. Con el tiempo, el enfermo va a necesitar ayuda en todas sus actividades diarias (ver artículo relacionado “Fases y etapas del Alzheimer: Tercera fase, deterioro grave“)
La rapidez con que la enfermedad de Alzheimer progresa y la esperanza de vida de quien la padece, varían mucho. Como promedio, las personas con enfermedad de Alzheimer viven de ocho a diez años después de los primeros síntomas. Sin embargo, esto depende, sobre todo, de la edad de la persona comienza a presentar los primeros síntomas.